Nuestro planeta se caracteriza por su gran diversidad cultural en la que uno de los elementos más diferenciadores que pone de relevancia esta diversidad cultural es el idioma o los idiomas que se hablan en cada país.
Si contemplamos la situación mundial actual tomando como base de reparto los idiomas y no los países, el prisma de percepción cambia radicalmente; entramos en una dimensión completamente diferente en la que se ponen de manifiesto las enormes oportunidades de negocio que se presentan, así como las necesidades multilingües que se pueden generar en las empresas en procesos de internacionalización.
Estableciendo un top 10 de los 23 idiomas más hablados a nivel global, las cifras hablan por si solas: el total de las tres primeras lenguas del ranking mundial (chino, español e inglés) supone un cuarto de la población mundial. Traduciendo nuestros contenidos corporativos a 8 idiomas llegamos al 65% de la población mundial, y si pasamos a un mínimo de 14 idiomas, llegamos al 80% de la población mundial.
Por este motivo, no es de extrañar que del 2005 a 2015, las empresas han aumentado sus idiomas de comunicación de 10 a 30 idiomas, un dato revelador que demuestra que implantar una estrategia multilingüe en nuestra empresa es, sin lugar a duda, un acelerador para nuestra actividad internacional, con efectos exponenciales.
¿Cuáles son las ventajas de una estrategia multilingüe?
La elección de los idiomas que formarán parte de nuestra comunicación multilingüe dependerá naturalmente de los mercados en los que queremos entrar. Para decidir qué idiomas escoger, solo basta con hacerse unas preguntas muy sencillas: ¿en qué idioma hablan nuestros clientes? ¿En qué idioma piensan? ¿En qué idioma tomarán su decisión de compra? ¿Estamos adaptando correctamente los contenidos en función del idioma de destino y de las especificidades culturales?
Las ventajas de implantar una estrategia multilingüe en nuestra empresa son muchas. Demostrando al usuario final que tenemos esa sensibilidad cultural que busca, dándole la posibilidad de comunicarse con nosotros en su propio idioma, generamos unos vínculos de confianza muy fuertes. Al mismo tiempo, quedamos reforzados como empresa al demostrar que el idioma no es una barrera en nuestras metas internacionales, poniendo de relevancia nuestro ADN internacional.
Además, si trasladamos el multilingüismo al entorno digital en el que vivimos hoy en día, la dimensión y las ventajas competitivas son enormes, por lo que constituye asimismo una herramienta de marketing muy eficiente. El impacto de una newsletter traducida a varios idiomas, de entradas de blog, de las actividades en redes sociales a más de un idioma es considerable, aumentando así el ratio de conversión de manera exponencial.
Trabajar con un partner experto
Para que nuestra estrategia multilingüe tenga los efectos deseados, es esencial trabajar con un partner que esté alineado con esta misma visión, ya que nos facilitará la presencia de nuestra empresa en diferentes partes del mundo, llevándola a un nivel superior, optimizando los procesos de traducción multilingüe y asegurando que nuestro mensaje alcance de manera eficiente el público o mercado al que va destinado. ¿Y lo más interesante de todo? Es la solución más eficiente, eficaz y rentable para nuestras comunicaciones.
¿Localizamos?
Asimismo, a la hora de escoger un partner en servicios de traducción es fundamental que contemple dentro de sus servicios, el servicio de localización, el cual consiste en adaptar el producto o sitio web al mercado de destino. El objetivo de esta fase del proceso de traducción es convencer al usuario final que la comunicación ha sido creada específicamente para él. En esta fase del proceso, adaptaremos los contenidos pero también el layout en función de las especificidades culturales del idioma de destino, procederemos a adaptar elementos de formato específicos al idioma deseado, o trabajaremos de manera muy precisa las listas de “keywords” con el fin de asegurar un buen posicionamiento SEO de nuestro producto o página web en el mercado de destino… porque las palabras VENDEN!
Finalmente, en nuestro título hablábamos de “la palabra como arma estratégica” ya que no solo hablamos de palabras, sino de todo lo que se esconde detrás de la palabra, es decir, en nuestro caso, el mercado de destino. Porque dependiendo de las palabras que utilizaremos, podremos vender más o menos.
El poder está en cómo persuadimos, está en dar el sentido exacto a cada palabra, sea cual sea el idioma utilizado, porque no es solo lo que transmitimos, sino, CÓMO lo transmitimos. Las palabras crean una realidad, por lo que hay que ser muy conscientes de lo poderosas que son.